Rol de Crítica. Un patrón que se repite.
Hola a todxs, esta semana me ha tocado desempeñar el rol de crítica, el cual consiste en comentar injusticias sociales que se dan en la actualidad. En esta ocasión, he decidido comentar la situación que viven las mujeres cuando la zona en la que residen entra en guerra. Se trata de un tema que, en estos momentos, está al alza, debido al conflicto entre Rusia y Ucrania, el cuál tomaré de ejemplo. Sin embargo, que utilice este pretexto no significa que esto no ocurriese antes, ya que también hay conflictos activos en zonas de Oriente, como en Siria o Palestina.
Para empezar, debemos tener en cuenta que las mujeres no van a la guerra, la encuentran en sus países. No son ellas quienes deciden si habrá o no guerra, no están nunca en posición de poder. Es decir, no se les pregunta si quieren participar en ella o no, principalmente, porque se considera que solo los hombres están capacitados física y mentalmente para ir a la guerra. Esto, en la mayoría de los casos, es impuesto también por un hombre y, como podemos comprobar, también es machista.
Partiendo de lo mencionado anteriormente, el papel de las mujeres, que deciden continuar en su país, durante los conflictos bélicos se basa en intentar proteger a sus hijos, familiares, amigos, mascotas, etc. Además, se les encarga la tarea de sostener la economía en su país, asumiendo, a su vez, numerosos trabajos para poder obtener algo de dinero y así poder mantener a su familia. Debemos ver esto desde el rol que se les asigna a los hombres, que son los que trabajan, mientras que las mujeres se preocupan de las tareas del hogar, con la diferencia de que su trabajo no está renumerado, como ocurre en Ucrania.
Además, el riesgo de que estas sufran algún tipo de violencia sexual se incrementa, como consecuencia de este conflicto. Testimonios como el de Martha, una mujer sursudanesa que se vio sumida en su país por la guerra, nos cuenta lo siguiente: “Nos golpean, nos humillan, nos detienen durante días para divertirse con nosotras. A algunas las han matado. Ninguna mujer te lo va a contar, pero ahí fuera nos han violado a todas. Saben que nuestros hombres no están aquí y nos violan para destruirnos. No buscan placer sexual. A veces usan palos.” De esta manera las utilizan como "trofeos" o "botines de guerra".
Sin embargo, las mujeres que tratan de huir del país tampoco encuentran una situación mejor. Además de tener más probabilidades de sufrir violencia sexual, también pueden ser víctimas de trata de personas, como está ocurriendo actualmente en la frontera de los países con Ucrania. Según varios periódicos, numerosas bandas criminales esperan a que mujeres y niñas crucen las fronteras, una vez allí, los proxenetas se aprovechan de su situación de vulnerabilidad y les ofrecen transporte "gratuito" para ir a diversos puntos.
Lauren Agnew, experta en políticas de trata de personas y que hace parte de la organización benéfica CARE, le indicó a MailOnline que “la guerra en Ucrania creará una situación que empeorará en términos de trata de personas. Tendrá un efecto dominó vulnerable en toda Europa y los refugiados corren un riesgo cada vez mayor de explotación". Igualmente, agregó: “Es seguro que, a medida que pase el tiempo, veremos un aumento en el número causado por los refugiados que son explotados por traficantes y terminan potencialmente como trabajadores sexuales, involucrados en bandas criminales o en trabajos forzados y esclavitud doméstica. No solo hay una alarmante pérdida de vidas a causa de la guerra, sino que este desplazamiento masivo de posiblemente hasta siete millones de personas de Ucrania significa que, sin duda, algunas terminarán traficadas”.
Finalmente, no debemos olvidar la situación que están sufriendo todas las mujeres transexuales que residen en Ucrania, que al no tener ningún documento que certifiquen que son mujeres o "cuya apariencia no se asemeja a la de una", se han visto obligadas por su gobierno a participar en el conflicto bélico.
En conclusión, podemos comprobar que en todas las guerras hay un patrón que se repite y es que en todas ellas, las niñas y las mujeres han sido víctimas, trofeos o espectadoras de dichos conflictos. No se puede negar que cuando estalla una guerra, las desigualdades e injusticias que sufren estas se agravan, sin olvidar, por supuesto, que los hombres también son víctimas de estos acontecimientos, pero con la única diferencia estos no tienen un añadido de sufrimiento solo por su género.
Un saludo y muchas gracias :).
Buenos días Candela, me ha parecido muy interesante la reflexión y el tema que has escogido para tu rol de esta semana ya que creo que es un tema que no se menciona en los medios de comunicación pero sigue siendo una consecuencia del patriarcado. En situaciones como la que vivimos actualmente las mujeres son víctimas "dobles" ya no solo por la guerra de su país sino por el papel que les imponen en una situación como esta por el simple hecho de ser mujeres. Creo que es un tema muy importante y debemos prestarle más atención, gracias por hacerlo un poco más visible, estoy totalmente de acuerdo con tu opinión.
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